Conocidos son los problemas de nuestros bosques por el aumento de la maleza. La casi desaparición de la ganadería extensiva y el poco valor que tiene la madera en las últimas décadas, han contribuido a que los bosques no se cuiden ni se trabaje en su conservación.
Poco a poco los bosques se han cerrado, las zarzas, hiedras y otro tipo de vegetación invasiva han cerrado caminos se han apoderado de los árboles, e impiden la entrada de los animales herbívoros que podrían controlarla. Esta maleza es la misma que hace de combustible para los incendios y que impide la circulación por el bosque.
Los latones de La Fueva se crían en estos terrenos, durante su crecimiento se alimentan de esta vegetación y remueven la tierra posibilitando la salida de otro tipo de vegetación. Los latones desbrozan el bosque permitiendo que tras su salida los bosques queden limpios y que el riesgo de incendio en esas zonas sea menor, al haber eliminado todo su potencial combustible.